Preguntas generales
1¿Cuándo hacer parapente?
Para volar en parapente biplaza solo tienes que contactar con nosotros y hacer tu reserva.
Debido a que es una actividad que se realiza en el medio natural, estamos condicionados por la meteorología,(pero no más que para ir a la playa o a un concierto al aire libre).
En todos estos meses es posible realizar la actividad con características diferentes durante el vuelo, frío, calor, paisaje verde, paisaje seco, nieve…. ¡En fin variedad de colores!, El valle cambia con las estaciones y el vuelo también. ¡Por eso tanta gente repite! ¡No hay dos vuelos en parapente iguales!
Las reservas de los vuelos se podrán realizar durante todo el año, aunque la actividad se realizará exclusivamente durante los meses de febrero a noviembre, siempre condicionadas por las condiciones meteorológicas.
Debido a que es una actividad que se realiza en el medio natural, estamos condicionados por la meteorología,(pero no más que para ir a la playa o a un concierto al aire libre).
En todos estos meses es posible realizar la actividad con características diferentes durante el vuelo, frío, calor, paisaje verde, paisaje seco, nieve…. ¡En fin variedad de colores!, El valle cambia con las estaciones y el vuelo también. ¡Por eso tanta gente repite! ¡No hay dos vuelos en parapente iguales!
Las reservas de los vuelos se podrán realizar durante todo el año, aunque la actividad se realizará exclusivamente durante los meses de febrero a noviembre, siempre condicionadas por las condiciones meteorológicas.
2¿Qué es un parapente?
Es un planeador ultraligero flexible que vuela gracias a su capacidad aerodinámica impulsado por la fuerza de la gravedad, que aprovecha las fuerzas aerodinámicas resultantes de su especial diseño y nos permite desplazarnos aprovechando las corrientes ascendentes del aire.
3¿Cómo vuela un parapente?
El vuelo en parapente obedece a las mismas fuerzas aerodinámicas que rigen el vuelo de las aves o los aviones. Su desplazamiento en el aire crea lo que denominamos viento relativo el cual origina las fuerzas que hacen posible el vuelo (sustentación y resistencia).
4¿Cómo se dirige?
El piloto lleva en cada mano un mando que sirve para girar o regular la velocidad del parapente. El piloto baja su mano derecha para girar a la derecha y lo mismo para la izquierda, provocando un aumento de la resistencia en el lado hacia el que quiere girar. Esto sucede debido a que los mandos que lleva el piloto en su mano van unidos a la parte trasera del ala (borde de fuga), doblando el perfil trasero en la mitad del ala que va unida a cada mando, aumentando la resistencia de esa mitad y reduciendo la velocidad a la que vuela dicha mitad del ala. El pilotaje es muy intuitivo y fácil.
5¿Cuánto tiempo dura un vuelo?
Depende de varios factores:
1- Las condiciones meteorológicas. El aire cambia continuamente dependiendo de multitud de factores que provocan movimientos tanto verticales como horizontales. Los movimientos horizontales afectan a la velocidad con que nos desplazamos por el aire y los verticales afectan a lo que llamamos tasa de caída, es decir teniendo en cuenta que el parapente como planeador que es, siempre baja con respecto al aire, los movimientos de este aire puede hacer que baje más o menos , que deje de bajar o que ascienda, dependiendo de la velocidad vertical de ese aire.
2- El tipo de ala. Existen alas con diferentes rendimientos, es decir, con diferentes tasas de caída, velocidades máximas y mínimas, etc….
3- La habilidad del piloto. Como ya hemos dicho el aire se mueve y el aprovechar estos movimientos también depende de la habilidad de cada piloto. Un piloto experto es capaz de predecir dichos movimientos y sacarle un mejor rendimiento a su vuelo.
En general los vuelos en parapente biplaza no suelen durar más de media hora, ya que los pasajeros que no están acostumbrados a los movimientos propios en el aire corren el riesgo de marearse, convirtiendo una experiencia maravillosa en algo desagradable.
Como curiosidad decir que los records de permanencia en el aire sobrepasan las 24 horas, aunque lo más habitual para un piloto experto que vuele por libre son de 2 a 6 horas siempre dependiendo de las condiciones meteorológicas.
1- Las condiciones meteorológicas. El aire cambia continuamente dependiendo de multitud de factores que provocan movimientos tanto verticales como horizontales. Los movimientos horizontales afectan a la velocidad con que nos desplazamos por el aire y los verticales afectan a lo que llamamos tasa de caída, es decir teniendo en cuenta que el parapente como planeador que es, siempre baja con respecto al aire, los movimientos de este aire puede hacer que baje más o menos , que deje de bajar o que ascienda, dependiendo de la velocidad vertical de ese aire.
2- El tipo de ala. Existen alas con diferentes rendimientos, es decir, con diferentes tasas de caída, velocidades máximas y mínimas, etc….
3- La habilidad del piloto. Como ya hemos dicho el aire se mueve y el aprovechar estos movimientos también depende de la habilidad de cada piloto. Un piloto experto es capaz de predecir dichos movimientos y sacarle un mejor rendimiento a su vuelo.
En general los vuelos en parapente biplaza no suelen durar más de media hora, ya que los pasajeros que no están acostumbrados a los movimientos propios en el aire corren el riesgo de marearse, convirtiendo una experiencia maravillosa en algo desagradable.
Como curiosidad decir que los records de permanencia en el aire sobrepasan las 24 horas, aunque lo más habitual para un piloto experto que vuele por libre son de 2 a 6 horas siempre dependiendo de las condiciones meteorológicas.
6¿Qué lugares son más apropiados para despegar y aterrizar?
Para despegar necesitamos una ligera pendiente libre de obstáculos y con el viento enfrentado a la ladera. También es posible despegar sin viento, aunque en este caso hay que correr hasta generar la velocidad que necesita el parapente para despegar.
El aterrizaje es bastante sencillo siempre y cuando se disponga de una superficie libre de obstáculos y de dimensiones suficientes como por ejemplo, las dimensiones de una pista de tenis.
En La Vall d’Àger disponemos de multitud de campos de dimensiones más que sobradas para aterrizar. Asimismo, también disponemos de diferentes zonas de despegue para diferentes orientaciones de viento.
El aterrizaje es bastante sencillo siempre y cuando se disponga de una superficie libre de obstáculos y de dimensiones suficientes como por ejemplo, las dimensiones de una pista de tenis.
En La Vall d’Àger disponemos de multitud de campos de dimensiones más que sobradas para aterrizar. Asimismo, también disponemos de diferentes zonas de despegue para diferentes orientaciones de viento.
7¿Por qué volar en Àger?
El valle d’Àger por su configuración geográfica de este a oeste posee unas condiciones ideales para el vuelo libre (parapente y ala delta). La sierra del Montsec situada en la comarca de la Noguera, provincia de Lleida, por su orientación sur, tiene las características óptimas para la generación de corrientes térmicas y dinámicas ideales para el vuelo. Además posee un acceso inmejorable por carretera asfaltada hasta el mismo despegue, equipado con un amplio aparcamiento para vehículos. Los innumerables campos de Àger nos ofrecen multitud de aterrizajes amplios y seguros. Todo ello hace de esta zona la mejor de Cataluña y una de las mejores del mundo para el vuelo en parapente y ala delta, y así ha sido reconocida internacionalmente.
El acceso desde Barcelona se realiza en buena parte por autovía gratuita por lo que hace muy cómodo el viaje hasta Àger. Aunque en Cataluña existen otras zonas de vuelo merece la pena acercarse a este valle para disfrutar de sus magníficas condiciones para volar y sus maravillosos parajes.
El acceso desde Barcelona se realiza en buena parte por autovía gratuita por lo que hace muy cómodo el viaje hasta Àger. Aunque en Cataluña existen otras zonas de vuelo merece la pena acercarse a este valle para disfrutar de sus magníficas condiciones para volar y sus maravillosos parajes.
Preguntas sobre seguridad
1Tirarse en parapente ¿Es seguro?
Ante todo debemos aclarar que en parapente no nos tiramos de ningún precipicio, ni de ningún avión, como si se hace al saltar en paracaídas, por lo tanto el concepto “tirarse en parapente” no es correcto. De la misma manera, tampoco es correcto decir, como mucha gente hace por desconocimiento, el término “saltar en parapente”, ya que lo que nosotros hacemos es “despegar” desde una pendiente de una manera similar a como despegan los aviones pero a una velocidad mucho menor, que conseguimos con una pequeña carrera.
Debemos tener en cuenta que nos movemos en un medio muy cambiante como es el aire, y los pilotos deben conocer bien este medio para poder evaluar que las condiciones sean las óptimas para el vuelo. Por lo tanto es peligroso para alguien que desconozca el medio y no tenga una formación suficiente, a menos que sea bajo la supervisión de una escuela o realizando vuelos biplaza con un instructor experimentado.
Los pilotos de Àger Parapent, no solamente tienen todas las acreditaciones posibles de la Escuela Catalana del deporte de la Generalitat de Cataluña y la Federación Aérea Catalana, sino que tienen una larga experiencia como pilotos biplaza, monoplaza e instructores que han enseñado a volar con seguridad a centenares de alumnos.
El vuelo en parapente biplaza, es la manera más segura de volar para quien quiera sentir la sensación de volar sin necesidad de tener conocimientos previos, siempre y cuando lo haga con instructores con la titulación y experiencia necesarias. En Àger Parapent tenemos un firme compromiso con la seguridad y limitamos la realización de los vuelos tanto en los cursos de parapente, como en los vuelos biplaza si las condiciones no son óptimas para su realización.
En los cursos de parapente de nuestra escuela, el alumno está supervisado en todo momento por instructores profesionales y titulados que son los encargados de todo lo relativo a la seguridad, minimizando los riesgos mediante una formación personalizada. Nuestros cursos de parapente se realizan con velas del nivel A, aptas para alumnos de iniciación y que priman la seguridad sobre otras prestaciones.
La profesionalización y el control sobre las titulaciones, han hecho posible reducir en las escuelas de parapente el número de accidentes a niveles realmente bajos.
Otro mundo distinto es el que concierne a las competiciones de parapente, que al igual que en cualquier tipo de competición de cualquier modalidad deportiva, los pilotos vuelan al límite de sus posibilidades, incrementando así la posibilidad de accidentes.
Debemos tener en cuenta que nos movemos en un medio muy cambiante como es el aire, y los pilotos deben conocer bien este medio para poder evaluar que las condiciones sean las óptimas para el vuelo. Por lo tanto es peligroso para alguien que desconozca el medio y no tenga una formación suficiente, a menos que sea bajo la supervisión de una escuela o realizando vuelos biplaza con un instructor experimentado.
Los pilotos de Àger Parapent, no solamente tienen todas las acreditaciones posibles de la Escuela Catalana del deporte de la Generalitat de Cataluña y la Federación Aérea Catalana, sino que tienen una larga experiencia como pilotos biplaza, monoplaza e instructores que han enseñado a volar con seguridad a centenares de alumnos.
El vuelo en parapente biplaza, es la manera más segura de volar para quien quiera sentir la sensación de volar sin necesidad de tener conocimientos previos, siempre y cuando lo haga con instructores con la titulación y experiencia necesarias. En Àger Parapent tenemos un firme compromiso con la seguridad y limitamos la realización de los vuelos tanto en los cursos de parapente, como en los vuelos biplaza si las condiciones no son óptimas para su realización.
En los cursos de parapente de nuestra escuela, el alumno está supervisado en todo momento por instructores profesionales y titulados que son los encargados de todo lo relativo a la seguridad, minimizando los riesgos mediante una formación personalizada. Nuestros cursos de parapente se realizan con velas del nivel A, aptas para alumnos de iniciación y que priman la seguridad sobre otras prestaciones.
La profesionalización y el control sobre las titulaciones, han hecho posible reducir en las escuelas de parapente el número de accidentes a niveles realmente bajos.
Otro mundo distinto es el que concierne a las competiciones de parapente, que al igual que en cualquier tipo de competición de cualquier modalidad deportiva, los pilotos vuelan al límite de sus posibilidades, incrementando así la posibilidad de accidentes.
2¿Por qué cancelamos los vuelos?
Como ya hemos explicado en los apartados anteriores hay diferentes causas que hacen del vuelo en parapente una actividad peligrosa, por lo tanto cuando alguna de ellas comprometa la seguridad del vuelo de los alumnos en los cursos de parapente, o la de los pasajeros que vengan a volar en parapente biplaza con nosotros, los instructores de Àger Parapent nunca van a dudar en cancelar la actividad.
Nosotros estamos continuamente valorando las condiciones meteorológicas, ya que son medianamente predecibles, por lo que si en algún momento antes de que se venga a realizar la actividad, estuviéramos completamente seguros de que el tiempo no nos acompaña, trataremos de ponernos siempre en contacto con los alumnos o pasajeros que vayan a venir a volar con nosotros para cancelar la actividad en ese día pasándolo a otro.
A veces, estamos en el despegue y vemos volar a otros parapentes, eso no significa que el día esté apto para el vuelo, ya que hay pilotos experimentados que asumen los riesgos de su vuelo respecto a las condiciones existentes en ese momento. Los instructores de Àger Parapent nunca van a sobrepasar los límites de seguridad, ni en los cursos de la escuela, ni en los vuelos biplaza, por lo que en estos casos e incluso en el mismo despegue nos reservamos el derecho a cancelar, siempre pensando en la seguridad de las personas que han confiado en nosotros, tanto para aprender ,como para disfrutar de esta experiencia maravillosa que es volar.
A veces, estamos en el despegue y vemos volar a otros parapentes, eso no significa que el día esté apto para el vuelo, ya que hay pilotos experimentados que asumen los riesgos de su vuelo respecto a las condiciones existentes en ese momento. Los instructores de Àger Parapent nunca van a sobrepasar los límites de seguridad, ni en los cursos de la escuela, ni en los vuelos biplaza, por lo que en estos casos e incluso en el mismo despegue nos reservamos el derecho a cancelar, siempre pensando en la seguridad de las personas que han confiado en nosotros, tanto para aprender ,como para disfrutar de esta experiencia maravillosa que es volar.
3¿Qué condiciones físicas hay que tener para volar en parapente?
Debemos distinguir si nuestra opción es hacer un curso de parapente o hacer un vuelo biplaza:
Para hacer un curso de parapente, no es necesario ser un atleta, simplemente hay que tener una condición física normal, que te permita realizar pequeñas carreras, ser capaz de transportar tu equipo (peso aprox. 15 kg) , tener más de 14 años y en estos casos hasta los 18 siempre con autorización de padres o tutores. Las personas con un peso de menos de 45 kg. pueden tener dificultades a la hora de encontrar un parapente de su talla, ya que los fabricantes no suelen hacer parapentes tan pequeños.
Para los vuelos en parapente biplaza no es necesario tener ninguna condición física especial, simplemente ser capaz de realizar una pequeña carrera, ya que en este caso todo lo hace el instructor. Hemos volado con niños desde 2 años a personas de hasta 80 años. Es apto para todos los públicos. Límite de peso de los pasajeros: 90kg.
En ambos casos lo más importante y que la escuela debe conocer es la existencia de alguna lesión o limitación que se tenga y que valoraremos en cada caso particular.
Para hacer un curso de parapente, no es necesario ser un atleta, simplemente hay que tener una condición física normal, que te permita realizar pequeñas carreras, ser capaz de transportar tu equipo (peso aprox. 15 kg) , tener más de 14 años y en estos casos hasta los 18 siempre con autorización de padres o tutores. Las personas con un peso de menos de 45 kg. pueden tener dificultades a la hora de encontrar un parapente de su talla, ya que los fabricantes no suelen hacer parapentes tan pequeños.
Para los vuelos en parapente biplaza no es necesario tener ninguna condición física especial, simplemente ser capaz de realizar una pequeña carrera, ya que en este caso todo lo hace el instructor. Hemos volado con niños desde 2 años a personas de hasta 80 años. Es apto para todos los públicos. Límite de peso de los pasajeros: 90kg.
En ambos casos lo más importante y que la escuela debe conocer es la existencia de alguna lesión o limitación que se tenga y que valoraremos en cada caso particular.
4¿Si tengo vértigo puedo volar?
El vértigo no afecta durante el vuelo, ya que todas las referencias están muy lejos de nosotros y además vamos sentados, con lo que la sensación de vértigo no existe. Hay pilotos que sufren de vértigo en su vida diaria y vuelan en parapente con total normalidad.
5¿Me puedo marear en vuelo?
No es algo frecuente, pero a veces pasa. Nosotros aconsejamos a todo el que sea propenso a marearse se tome antes de hacer la actividad una medicación contra el mareo. Es importante también no beber, ni comer en exceso antes de volar. El realizar fotos mirando el visor de la cámara o teléfono móvil, incrementa en gran medida las posibilidades de marearse.
6¿Pasaré mucho miedo en el vuelo?
En general, todo lo que es desconocido nos crea cierta inquietud, por lo que es normal sentir cierto nerviosismo antes de realizar la actividad. Habitualmente la gente suele sentir esta inquietud en los momentos previos al despegue, pero esta sensación se le pasa a prácticamente todo el mundo cuando se siente en el aire cómodamente sentado.
7¿Estamos cubiertos por un seguro volando en parapente biplaza?
Àger Parapent dispone de un seguro de responsabilidad civil y accidentes que cubre todas las actividades que realizamos
Preguntas sobre meteorología
1¿Cuáles son las condiciones meteorológicas adecuadas para volar en parapente?, ¿Se necesita mucho viento?
Como ya hemos comentado más arriba, el parapente despega de forma similar a como lo hace un avión, aunque en nuestro caso el motor son nuestras piernas. Se puede despegar sin viento alguno, pero para hacerlo deberemos conseguir alcanzar la velocidad mínima de vuelo que son alrededor de 20 km/h.
Puede ocurrir que tengamos viento pero de una dirección que no sea la adecuada, es decir, que pueda venir de un costado o de cola, en estos casos este viento nos puede dificultar el despegue o incluso impedirlo, en todo caso será el instructor o piloto biplaza el que decidirá si es posible el despegue o no. Lo ideal será que en el despegue tengamos un viento enfrentado, que cuanto más intenso sea, menos tendremos que correr, pero teniendo en cuenta que el parapente es una aeronave lenta, esta intensidad de viento tiene un límite, que es la velocidad a la que el parapente puede correr, y esta es de aprox. 30 km/h; lo ideal sería un viento enfrentado de unos 15 km/h.
En los vuelos biplaza es el piloto el responsable de la seguridad y el único capaz de decidir si la dirección e intensidad del viento son las adecuadas para el despegue, para el vuelo y para el aterrizaje.
Por lo que respecta a los cursos de la escuela, mediante clases teóricas se enseña a los alumnos a identificar las condiciones óptimas para volar y en todo caso, serán los instructores, los que decidirán si las condiciones son las adecuadas, teniendo en cuenta el nivel de cada alumno.
Puede ocurrir que tengamos viento pero de una dirección que no sea la adecuada, es decir, que pueda venir de un costado o de cola, en estos casos este viento nos puede dificultar el despegue o incluso impedirlo, en todo caso será el instructor o piloto biplaza el que decidirá si es posible el despegue o no. Lo ideal será que en el despegue tengamos un viento enfrentado, que cuanto más intenso sea, menos tendremos que correr, pero teniendo en cuenta que el parapente es una aeronave lenta, esta intensidad de viento tiene un límite, que es la velocidad a la que el parapente puede correr, y esta es de aprox. 30 km/h; lo ideal sería un viento enfrentado de unos 15 km/h.
En los vuelos biplaza es el piloto el responsable de la seguridad y el único capaz de decidir si la dirección e intensidad del viento son las adecuadas para el despegue, para el vuelo y para el aterrizaje.
Por lo que respecta a los cursos de la escuela, mediante clases teóricas se enseña a los alumnos a identificar las condiciones óptimas para volar y en todo caso, serán los instructores, los que decidirán si las condiciones son las adecuadas, teniendo en cuenta el nivel de cada alumno.
2¿Qué ocurre si el viento cambia mientras estamos volando?
El viento cambia continuamente y es normal que ocurra. Una vez en vuelo esto nos afecta de varias maneras, como son: la velocidad a la que nos desplazamos respecto al suelo, derivas en la dirección de vuelo y turbulencias que la estructura flexible del parapente absorbe sin problemas. Además el aire no sólo se mueve horizontalmente, sino que también lo hace verticalmente, dándonos la posibilidad de aprovechar estos movimientos verticales, cuando son ascendentes, para permanecer más tiempo en el aire o ganar altura si tienen la intensidad suficiente.
Existen casos en los que estos cambios se producen rápidamente y podrían llegar a comprometer seriamente la seguridad del vuelo, como son la formación de tormentas o la llegada de frentes. Afortunadamente estas situaciones son predecibles pudiéndose cancelar el vuelo para evitarlas.